miércoles, 30 de abril de 2008

Adios, para siempre

Hoy no me importaría morirme en la penumbra,
en la penumbra fría de un cuarto de hospital;
pues hoy me he dado cuenta, sumido en el quebranto,
que el amor de mi vida era también mortal.

Fue un amor limpio y puro; un amor reluciente.
Un amor sin fronteras; un amor de verdad;
forjado en el coraje, forjado en el cariño,
amamantado siempre de una dulce amistad.

Ese amor infantil, parecía interminable;
amor adolescente creciendo sin final.
Amor maduro y fuerte forjado con los años;
amor que no sentía el paso de la edad.

Pero todo en la vida, incluso lo más fuerte,
se quiebra sin remedio sin saber el por qué.
La vida se desgarra, se aviva el sufrimiento,
se resquebraja el alma cuando se va el querer.

Ahora que te has marchado, más fuerte es el amor.
¡Adios por siempre, cielo! Nunca te olvidaré.
Y no temas por nada, que siempre estaré ahí
y dentro de muy poco junto a ti moraré.

Hoy no me importaría dormirme con la aurora,
arrullado en los brazos de un Ángel Celestial.
Hoy no me importaría cerrar mis ojos tristes,
sabiendo que en el Cielo, alguien me ha de esperar.

domingo, 20 de abril de 2008

Tu Alma

Alma humana, pensativa
en todo tu alrededor;
no te preocupes y piensa
quién de verdad te da amor.

Alma frágil, muy quebrada
por los golpes de la vida;
no dejes que te acribillen
pues perderás la partida;
la partida del vivir,
la partida del soñar
que nunca debes perder,
¡que siempre debes luchar!

Alma demasiado buena,
alma siempre solidaria;
piensa en lo bueno que tienes,
¡no te sientas solitaria!

Si de verdad quieres ser
un Alma por fin feliz,
nunca pierdas la esperanza
y la ilusión de seguir,
luchando por lo que quieres,
buscando tu libertad;
sólo tienes que encontrar
a quien te ame de verdad.

Alma pura, limpia, bella...
esperanzada de amor;
todo lo que te negaron
hoy te lo puedo dar yo.

Y es que dos Almas iguales,
y es que dos Almas gemelas,
si además son bondadosas,
tiernas, sensibles y buenas,
lo tendrán todo en la vida:
paz, amor y bienestar;
con Almas como las nuestras,
hoy lo podemos lograr.

Nunca existirá en el mundo
un Alma como la tuya,
igual que sólo hay un Sol,
igual que sólo una Luna.