(Esta poesía la escribí hace 22 años, cuando murió el insigne Alcalde de Madrid, Enrique Tierno Galván)
Hemos perdido al Alcalde.
Hoy Madrid está de luto.
Aquél que sembró su vida
para dejarnos el fruto.
Hiciste de una gran urbe
un lugar de convivencia,
un lugar alegre y vivo.
¡Gracias por tu gran herencia!
Tu recuerdo nunca muere,
tu labor es perdurable;
has sido para Madrid
un hombre honesto y amable.
Has jugado con los niños,
sufrido con los ancianos;
has conseguido que todos
nos tratemos como hermanos.
Nos preparaste mil fiestas,
verbenas y grandes ferias.
¡Enhorabuena, Maestro,
porque tu labor fue seria!
Has dejado de existir
y ahora eres materia inerte.
Cuando menos lo esperabas
te sobrevino la muerte.
Enrique Tierno Galván,
figura de nuestro mundo,
has dejado en tu Madrid
un vacío muy profundo,
que nadie podrá llenar;
nadie llegará a tu altura.
Tu gestión en la ciudad
ha sido sabia y madura.
Se está llorando tu muerte
en el Pueblo madrileño,
en todas partes de España
e incluso en el extranjero.
La pena que nos embarga
será suplida al saber,
que tu espíritu cordial
jamás vamos a perder.
A pesar de tu humildad,
puedes estar orgulloso
por hacer de tu ciudad
algo bonito y hermoso.
Enrique Tierno Galván...
enriqueciste la vida,
enterneciste a la gente,
galvanizaste la Villa.
Viejo profesor, amigo;
entrañable luchador;
no tenemos tu presencia,
pero sí tu gran labor,
al frente de éste, ¡tu Pueblo!,
de esta Villa de Madrid.
¡TE QUEREMOS NOBLE ALCALDE!
¡TODOS LLORAMOS POR TI!
jueves, 6 de marzo de 2008
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2 comentarios:
Es verdad que fue un Alcalde querido por todos y para nosotros supuso ser testigos por primera vez,quizas, de lo que significa la pérdida de una gran personalidad pública.
VAmos ,Javier, que nos tienes en ascuas.
¡¡¡Queremos más!! :-)
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